Déjame llorarsi tomaste el camino real
el derecho
el que mece el recuerdo
acunando el olvido
si dices –no puedo/es imposible-
si dices –no puedo/es imposible-
¿para qué regresas
a hurgar la herida nueva
endulzando lo amargo de ayer
en una despedida sin retornos
según jurabas?
para luego
sin saber si el amor alcanza
sin conocernos
-en diez palabras-
reincidir / reincidir
te suplico
déjame llorar a solas
este mi dolor de ausencias
el duelo que me dejas
este no ser
en un amor que fue quimera
de tres instantes de felicidad
Migdalia B. Mansilla R.
Fecha: siempre en esta noria de los adioses perdidos.
Mayo 27 de 2008
Migdalia Mansilla
7 comentarios:
Qué maravilla que son tus versos Migdalia ¿qué decirte? ya sabes lo que siento ante tus letras.
Besos
Liliana
Bella página amiga, y hermoso poema...sabes que siempre seguiré tus huellas...
Un abrazo
Mig, las quimeras son quimeras, el despertar sin ellas duele, quizás haya que seguir sin esas y lograr otras más cercanas, más palpables.
Besos
Elisabet
Si al llorar liberas la magia de la poesía, aligeras la pena, haces más sereno tu andar.
Gracias por dejarme enjugar tus lágrimas...
Tres instantes suelen ser toda una vida, el collage completo de una historia que no podemos resolver.. /
Qué caminos del corazón sacan de tí estas cuitas, a pesar de todo tan hermosamente dichas, mi amiga..
Muy bello tu poema. A veces necesitamos llorar para lavarnos de viejos adioses.
Un beso grande.
Un placer disfrutar de tu talento.
Un abrazo
Maria
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